¿Tu perro vomita? Cuándo hay que preocuparse y cuándo no


Escrito por Elena Fernández

Que tu perro vomite puede no ser un problema, si lo hace raramente. Pero en otros casos, el vómito es una señal de alarma que hay que atender rápidamente. 

¿Tu perro vomita por estas 5 razones? En principio no hay problema

No te preocupes si tu perro vomita en estos casos, siempre y cuando sean situaciones muy puntuales:

  1. Cambio repentino en la dieta: si has cambiado recientemente el tipo de comida y vomita poco después, podría ser una reacción a la transición de alimentos. Procura hacer esos cambios de forma progresiva.
  2. Comer demasiado rápido: algunos perros devoran la comida a velocidad, y a veces pueden vomitarla. Mira estos trucos para conseguir que coma más despacio. 
  3. Esfuerzo excesivo: si tu perro ha estado jugando vigorosamente o ha estado haciendo ejercicio intenso, puede vomitar debido al esfuerzo físico.
  4. Reacción a una presa: si tu perro ha comido hierba u otra materia no digerible que irrita su estómago, podría vomitar para eliminarla.
  5. Vómito aislado: si tu perro vomita una vez, pero luego vuelve a su estado normal, no es probable que sea motivo de preocupación.

5 causas de vómito que sí te deben preocupar

Hay varias razones por las que un perro puede vomitar, algunas de las cuales pueden ser relativamente benignas y otras más serias:

  1. Problemas gastrointestinales leves: Esto puede ser causado por comer algo que no le sentó bien al estómago del perro, como comida nueva, basura, hierba, etc.
  2. Intolerancias: si has cambiado recientemente la comida de tu perro y vomita repetidamente, está claro que no le está sentando bien. Debes consultarlo y ajustar la dieta.
  3. Problemas de ansiedad: que un perro vomite a menudo por comer demasiado rápido, puede ser un síntoma de un trastorno de ansiedad más importante. Si no responde a los trucos más sencillos, quizá necesites la ayuda de un educador que analice problemas de conducta.
  4. Intoxicación o envenenamiento: suele ir acompañado de otros síntomas, como salivación excesiva, letargo, diarrea, dificultad para respirar o convulsiones. No pierdas un segundo, se trata de una urgencia veterinaria.
  5. Otras enfermedades: el vómito puede formar parte de la sintomatología de enfermedades hepáticas, renales, obstrucción intestinal u otras. 

En estos casos, y en general, cuando tu intuición te indique que ocurre algo que se sale de lo normal, consulta con el veterinario para que examine a tu perrete y haga un diagnóstico preciso. 

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Sobre la autora:

Elena Fernández

Loca de los gatos y de cualquier bicho viviente. De hecho, si pudiera tendría un zoo (de los éticos, claro). Me dedico a bucear en internet para encontrar trucos, productos y servicios para que humanos y animales convivamos felices.

Declaración: si bien realizamos una minuciosa investigación para asegurarnos de que el contenido que ofrecemos es preciso y veraz, ten en cuenta que este artículo es meramente informativo, y en ningún caso se debe interpretar como diagnóstico o consejo veterinario. Asimismo te recomendamos que, en todo tema relacionado con la salud de tu peludo, consultes siempre con tu veterinario y confíes en su consejo.